
Tengo un dolor en la puntada
que me da puyazos de noche
¡y en la madrugada!
He tomado remedios a montón
y no salgo de este atolladero,
¡ay, Dios, qué dolorón!
A pesar de tanto y tanto esmero
de alivio yo no encuentro nada
¡no, no lo quiero!
Quiero que vuele de mí cual alimoche
y salirme de este vaporón
porque ya estoy cansada
¡no más boches!
B. Osiris B
No hay comentarios:
Publicar un comentario