Tragedia

Tragedia

Sentir todo lo que sientes

Y deber luchar con eso

Vivir a pesar de

Sobrevivir

Sentir

Ganas de abandonarlo todo

Y aún así seguir

Sobrevivir

Ausencia de ganas

Ausencia de mí.

Patricia Lara P

Madeja

Madeja

Veo ese pequeño cabello salir de uno de mis poros.  Decidí arrancarlo, primero con los dedos, luego con un depilador.  Era tan pequeño y delgado que no lograba asirlo; menos arrancarlo.  

Como siempre me obsesioné.  Hurgue entonces con una aguja, retirando piel y de nuevo los dedos y de nuevo el depilador.  Por fin lo agarré y empecé a tirar.  Halé y seguí halando ya tengo una madeja de pelo enredada a mis pies y sigo halando.

Patricia Lara P

Ellas

Ellas

Soñé con una mujer que eran tres.  

Caminé hasta llegar a la casa de mi abuela.  La ví desde la entrada, pero al aproximarme y pensar que era ella, ví a mi suegra, la cual casi al instante se transformó en mi mamá.

Las tres, desde ese cuerpo enjuto, con manos temblorosas me acariciaron.  Sus ojos reflejaban mucho amor.  

A pesar de eso, me sentí terriblemente triste.

Patricia Lara P

Los veo

Los veo

Llamaron mi atención desde hace unas tres semanas.  Los note por la forma de tomarse las manos.

Ella sentada al lado de él.  Tímidos ambos.  Pero con las manos unidas, apretadas.  Cómo si de una tabla de salvación se tratara.

El de unos 40 y tanto.  Ella unos diez años mayor.  Quizá.

Cuando los vi por primera vez pensé que se estaban reconciliando de alguna pelea tonta.  Pues él la atrajo y la besó despacio.  Sin premura.  Ella lo dejó hacer, coqueta y fingiendo distancia.

Otro día los vi hablar, alegres.  Tomados de las manos como antes.  

Me recriminé por pensar que eran amantes.  Pensé que podrían ser hermanos, hasta madre e hijo.

Hoy, los sobrepasé.  El empujaba despacio una bicicleta. Ella lo miraba y le sonreía.  Caminaban tan lento que los volví a encontrar a mí regreso.

Se despedían sin ganas, sin prisa.  Asidos de las manos.  No se querían soltar.  Pero debían hacerlo.

¿Es un amor furtivo que nace?

Los vi.  Por supuesto ellos ni se percataron.  Les di mi bendición y les deseé lo mejor.

Que Dios los guarde.

Patricia Lara P

¡A vivir, carajo, el día!

Ahí le dejo... Tomando sus palabras de cierre... ¡No respondo!

¡A vivir, carajo, el día!, que pa´ luego se hará tarde

a rescatar del silencio a la sonrisa y la carcajada afable

a afanarse en estar vivos con cada hálito de aire

a vivir –aunque desvivas- hasta ese dolor tan grande.

A vivir, que te lo debes, por encima del dolor

a avanzar en el camino de la amistad… ¡del amor!

que la vida continúa, aunque le huyas al fragor,

y por mucho que ahora llueva, ¡ya vendrá un tiempo mejor!

 

A vivir, que la existencia del tiempo presente apremia

y aunque hoy no halles un respiro, ¡vive, ríe, canta, sueña!

porque la sonrisa es flama que de gozo el alma incendia

y de ella, renaciendo, serás luz, ¡serás estrella!

 

¡A vivir, carajo, el día! –aunque llores y te estreses-

y, más temprano que tarde, serán oídas tus preces.

A vivir, que el tiempo tarda un poco algunas veces

¡A vivir, carajo, el día, que muy bien te lo mereces!

Osiris Bocaney

Caminos

Caminos

Me gustan los caminos
Jamás engañan
Son tristes, son alegres
Son arduos, sinuosos
Largos, planos, empinados.

 -Siempre conducen a algo-

Patricia Lara P.

Rex, Gustavo

Acabo de encontrar entre mi ropa, un pelito de Gustavo o de Bástian y pensé que por ahí mis hijos guardan unos nudos de pelos de nuestro perrito Rex.  Nunca había encontrado beneficios en eso de guardar "bobada" y media hasta hoy. 
Es que mi corazón se regocijó al recordarlo y al saber que además de sus cenizas algo más de su esencia nos acompaña.  Y claro, su recuerdo y amor por siempre.

Patricia Lara P

Todo por nada

Y de nuevo yo aquí... Pensando pensamientos

Una canción baila en mi memoria.  "Y la vida me cambió, todo por nada".

Y me quedo pensando en el momento en que lo pierde y entiende que lo perdió.  A veces,  casi siempre.  No sabemos lo que tenemos.

He cantado esa canción muchísimas veces, y hasta ahora la pienso.

"Como un regalo, llegaste a mí, y sin abrirlo siquiera, te perdí".  Ah juemíchica.  ¿Qué duro no? 

Bueno, mi día apenas comienza.

Por cierto.  Alguien sabe como estimular la producción del colágeno para mejorar la flexibilidad de la piel?

Buenos días amigos.  Se les quiere.

Patricia Lara Pachón

Huellas

Eso de ser ama de casa como que acaba con las huellas digitales. Tanto limpiar, sacar polvo, barrer, trapear, lavar; se queda uno sin ellas. Hoy en día en los bancos, mucho del reconocimiento lo hacen por ese medio.  

Estuve en el banco y el señor cajero, intentó leer la huella de mi dedo índice.   No funcionó y quería continuar con el resto de los dedos.  Yo recordé que hace unos días había tenido el mismo problema, y que la única huella que había podido ser leída había sido la del dedo del corazón de la mano izquierda. Así que le dije al señor haciendo el gesto; ésta es la única huella que han logrado leer esos aparatos.   En ese mismo momento no me di cuenta pero luego Sí.  Y fue que le hice un gesto obsceno al pobre hombre.  (Jajajajaja) ¿eso pasa por ser ama de casa o qué?

Ops

Patricia Lara P

La horca

La horca 

La horca pende

¿Quién sabe cuántos cuellos acarició primero

Y oprimió después?

Yace ahí, ahora

Inerte.

Cobró vida minutos

Y cobró vidas también.

Pende.

Pensaría que incapaz de causar dolor o daño

Pende.

Inconsciente ella de sí misma.

Pende.

Patricia Lara P

Bruja soy

Bruja soy

Y sí.

Yo soy la bruja de la casa de dulces, la que convirtió en cisnes doce príncipes.  La que envenenó la manzana.

Soy la que preguntaba a un espejo quién es la más bella.

La que encerró en una torre a una niña de dorada cabellera; la que arroja  maldiciones a diestra y a siniestra.

Soy la del gato negro y la escoba que vuela.  La de la verruga en la nariz.  La que hace llorar a los niños en las noches y la que se recuesta en el pecho de aquellos que desea.

Sí.

Soy esa bruja.

La que prepara pócimas de amor y desamor.  La que hace amarres, la que adora a Luzbel.

La que en noches de luna llena desnuda danza.

Sí.

Patricia Lara P

Cardo o mimosa

 

Hay personas que son cardos

Otras sencillas mimosas

Algunas son duros troncos

Otras son rosas hermosas.

Cada quien es lo que es

A veces solo, aquello que puede ser.

Patricia Lara P

Invisibilidad

Ingresé a la clínica en forma normal.  Agarrar turno de una máquina.  Triage con toma de presión arterial y referir el accidente.  Luego de un buen rato atención del médico general.  Retirar el vendaje y cuento de nuevo.  La radiografía e historia médica de la isla no sirvió para nada.

Había que realizar nuevos exámenes.  Me hicieron sentar en un rincón de la clínica desde el cual escuchaba personas que no veía y nada más.

Al cabo de un buen rato y de sentirme en el limbo voy a buscar personas.  Alguien que me haga sentir que en realidad existo.  Que aún no soy una sombra.

Pasa el tiempo.  Viene alguien que se sienta en una de las sillas afirmando que hace mucho frío.  Se cobija bien el pecho, las piernas, los brazos y hasta parte de la cara.  Yo pienso que tener los pies descubiertos y calzados con sandalias no le va a ayudar a entrar en calor.

Luego de un par de minutos la señora ronca.  Un sonido estentóreo brota de boca y nariz.  Al observarla más también concluyo que ella es un ruido durmiente.

Aún no llega el camillero a llevarme y sigo sintiéndome olvidada.  Llegan dos personas más con un enfermero.  Empezamos a hablar y les refiero mi hisotoria, mi inconformismo.  

El enfermero me escucha sin opinar.  Pero presta atención.  Se retira y al cabo de un par de minutos regresa.  "Señora, me dice, pase que la van a atender ya".   Me causa suma curiosidad pues me habían dicho que se podían tardar un par de horas.

Llego a donde está el doctor y siento que quieren desembarazarse de mí (jajajajaja) al parecer mis quejas son fundadas y prefieren darme de alta.

Salgo después de pagar por una atención que siento no lo fue.

Patricia Lara P

Estoy sola

Estoy armándome de valor para ducharme.  No es que no me haya duchado hoy.  Sino que después de la caminada y de todas las vueltas que hice pues estoy muy sudada y tengo que volverme a bañar.  Resulta que aquí tengo el televisor al frente y estoy casi que acostada en mi cama, y de pronto dijo: "Será que me baño, ¿ustedes que opinan?". Y me quedo pensando después.  Si alguien me hubiera contestado que habría hecho yo.  Bobadas de uno no.  Jajajajajaja.

Patricia Lara P