miércoles, 14 de octubre de 2009

Yo lo amo


Está acostado conmigo, puja y se queja, lo escucho tan fuerte que levanto mi cabeza para mirarlo. Ahí acostado a mis pies, lo alcanzo, lo abrazo, lo beso en el hocico y lo suelto de nuevo; él no acepta tantas demostraciones de afecto, de mí afecto. Me mira con displicencia y mullendo la cama de nuevo se acuesta.
¡Cómo amo ese gato Dios mío!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Burbujeando

  Burbujeando ¿No les encanta cuando toman una bebida gaseosa y sienten la necesidad de burbujear también? Obviamente es un disfrute en soli...