jueves, 20 de octubre de 2011

Anoche

Anoche un frío

-hielo-

se apoderó de mí

Sentí helados mis pies

Mi cuerpo,

-mi alma-

Una lágrima se deslizó

-despacio-

Ganas de llorar tuve

-y no-

Me abrigué

tomé algo caliente

y el frío persistió

Afuera hacía frío

adentro

-más-

Una lágrima

-hielo-

se congeló en mi rostro

mi alma arrugada

y marchita

intentaba reír

mi rostro

en rictus congelado

impertérrito estaba.

Anoche tuve frío

adentro el hielo

-se agolpaba-

afuera

el calor de la cama

la cobija

-se enfriaban-

Tuve frío y ganas de llorar

helada estaba

-adentro y afuera-

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