Se pasea con su
colita en alto.
Alegre.
Va y viene como el
dueño y señor.
Se nota que llegó
un día
y se quedó
dispuesto
a amar y a hacerse amar.
a amar y a hacerse amar.
Ahora es dueño y
señor
del sitio al que
llegó
y convirtió en
hogar.
Patricia Lara P.
No hay comentarios:
Publicar un comentario