(Fotografía de Santiago Lopera)
Y me tocó el alma
y no existe caricia más íntima que esa
y se fue quedando entre los pliegues
y dejó un perfume tenue
y un calorcillo dulce
y una sensación de bienestar que dura
y una sonrisa que permanece
y que no se acaba
y que cuando se va extinguiendo
retorna.
retorna.
Patricia Lara P.
No hay comentarios:
Publicar un comentario