Acostumbrada estuvo,
de alguna manera
un poco resignada;
pero ya no lo
estaba.
Y es que uno se
acostumbra
y se desacostumbra,
y por lo mismo y
todo;
uno se acostumbra
a desacostumbrarse.
Y caer, recaer,
pararse, levantarse,
para caer de nuevo;
no es la idea.
Se desacostumbró
y ahora su
costumbre
es
desacostumbrarse.
Patricia Lara P.
No hay comentarios:
Publicar un comentario