domingo, 2 de agosto de 2009

De la vida real...


¿Y ella pensó al ver el remolino de gente junto al tren?
"Voy a ver que me toca del muerto... " Y el muerto era de ella. No realmente muerto. Estaba viva, pálida, fría, en un charco de sangre, bañada en ella y viva.
La gente la rodeaba y no alcanzaba a saber qué sucedía, sintió cuando las ruedas del tren envolvieron su vestido, sintió cuando giraba sobre ella misma y un brazo caía sobre las vías del tren e instantáneamente una rueda pasaba sobre ella, vio como se imflamaba de sangre el muñón mientras la mano caía del otro lado.
Vio más y más gente y escuchó a alguien al acercarse preguntar: "¿Qué me toca del muerto?"
En ese mismo instante de sus labios sufrientes salió la palabra "mamá" y la continuación de la frase: "Ayudame"

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