lunes, 3 de agosto de 2009

Anoche asesiné

"Anoche asesiné por ti; un sueño absurdo, una noche pésima, pésima. No recuedo casi ningún detalle."
Sólo se que al despertar sentí un extraño y amargo sabor en la boca y un rictus de dolor contrajo mis labios rojos... más rojos de lo usual por cierto. Pasé mi lengua por ellos suavemente y un sabor salobre se pegó a ella.
Miré a mi alrededor con detenimiento y con admiración noté un cuarto muy ordenado. Hmmmmmmm, un cuarto tan ordenado a mi alrededor; !qué curioso!
Jamás imaginé que al despertar como hoy, pudiera ver algo así. Estaba segura que vería el desorden acostumbrado. Un desorden total para ser mas precisa. Observo con más detenimiento y veo un espejo que llama poderosamente mi atención, miro en él mi reflejo. ¿Soy yo? ¿Qué ha pasado conmigo? Me veo diferente... alta, delgada y horror de horrores plana. ¿Donde esta mi redondez natural? Mi busto, mi pancita, mi pompis.
¿Que me pasa? ¿Qué ha sucedido conmigo? Me detengo en mi rostro y noto que mis ojos antes café claro brillan y resplandecen en verde, verde esmeralda brillante y casi febriles y mis labios rojo carmín brillan alegremente en mi cara pálida. Pero... son muy delgados, son casi como una línea que le resta armonía al conjunto. No logro entenderlo, mi cara antes redonda y saludable se ve enjuta y triste.
¿Qué ha pasado conmigo? ¡Me asusto tanto! Estoy tan sobresaltada, tan nerviosa que salto en la cama y me despierto.
Paso las manos por mi rostro, observo a mi alrededor y es mi cuarto, mi desorden acostumbrado, mi vida ha retornado a mi.
¿Seguro ahora si estoy despierta? O solo soy un sueño que inicia y termina interminablemente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Veo

  Veo esas paredes de bahareque, blancas. Puerta roja a juego con la única ventana. Veo a María la O con sus ojos brillantes, su sonrisa y s...