Recostado en la hierba
Tú me observas quieto
no te mueves.
Me acerco
vuelo, te sobrevuelo
Me acerco aun más
no intentas alcanzarme
y menos retenerme.
Me poso en tu mano.
Me observas solamente
despliego aun mas mis alas
y vuelo, te sobrevuelo.
Me llego hasta tus labios
y un beso dejo en ellos.
Vuelo de nuevo, te sobrevuelo
El néctar de tus labios
me enloquece
me embriaga
Ahora soy toda tuya
no logro alzar el vuelo
y me quedo ahí en ti
No intentas retenerme
pero lo haces.
Y ya no puedo más alzar el vuelo.
Suele pasarnos cada que nos enamoramos, que bello escrito y si, perdemos nuestra libertad. Abrazos
ResponderEliminarGracias Erika, un abrazo grande.
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