Tengo un dolor
hay días en que la vida me duele
el alma se me apachurra
los ojos miran sin ver
y solo escucho;
Me escucho
Tengo un dolor
mi piel se sensibiliza
los recuerdos se ahondan
las palabras golpean
los suspiros ahogan
las manos se tienden
y aun estando no estás.
Tengo un dolor
el corazón se me hace chiquitico
el espíritu estrecho
intenta salir
romper el duro cascarón
y renacer
Nacer de nuevo
Tengo un dolor.
En una época me habría sentido muy tocado por tu texto, pues era una persona que se... refugiaba en el dolor, hoy lo veo como un bello texto, pero desde fuera, sin identificarme, apenas como la obra de una muy buena escritora.
ResponderEliminarUn beso.
Humberto.
Gracias Humberto, en realidad tanto lo bueno como lo malo dura instantes. Así que el dolor se siente y pasa y luego una alegría viene y así sucesivamente con todos los estados de ánimo. Muchas gracias por leerme. Un abrazo.
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