Solo quien ha vivido sabe
que hay momentos para reír
y hay momentos para llorar.
Que a las lágrimas el viento
se las lleva
o las seca.
Que las risas se quedan
perennes en el rostro
dándole brillo y vida.
Solo quien ha vivido sabe
que la vida es un paso
que la muerte es uno más
y que el infinito es ancho.
Solo quien ha vivido sabe
que el odio arruga el alma
y que el amor nos inmortaliza.
Solo quien ha vivido sabe
que sembrar un árbol
tener un hijo
y escribir un libro
no es lo único que nos permite
permanecer en el tiempo
y nos hace sentir vivos
y felices.
Solo quien ha vivido sabe
que la vida por si misma
es valiosa
pero sí es una vida en compañía
lo es aún más.
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