miércoles, 27 de mayo de 2020

Ella



Y desde esa primera vez, la vida se le fue en llegar, intentar echar raíces, arrancarlas con dolor y huir de nuevo.
Es que una vida construida desde un deseo, desde una invención no dura mucho.
Siempre sucederá algo que te hará correr de nuevo llena de miedo, mirar solo al frente y arrancar de cero.
Pobre mujer. 
Huir, siempre huir.

Patricia Lara Pachón

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Las margaritas de Octavio

Las margaritas de Octavio  Octavio amaba las margaritas, pétalos blancos con corazón dorado; repleto de dulce polen. Pero en la calle ochent...