miércoles, 27 de mayo de 2020

Él y aquel

Él y aquel

Él le envidiaba a aquel esa hermosa familia.  Ese par de muchachitos sonrientes y el que venía en camino.  Le envidiaba aquella a la que consideraba la mujer más hermosa del mundo.  La casa espaciosa y tranquila, el frondoso limonar del patio, la silla en el pórtico.
Aquel le envidiaba a él la libertad ansiada.  El poder viajar sin ataduras. La oportunidad de llevar a la cama a esta mujer u otra.
¡Cómo es la vida!  ! Cómo somos los seres humanos!  
No hay manera de tenernos contentos, conformes, plenos.
Yo aquí pensando en la serie que comencé a ver.

Patricia Lara Pachón

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cristal rajado

  Cristal rajado  Una ventana grande, grande, vidrios empañados por la mugre de años. Grasa, sudor, agua, sal, polvo; todo tan empegotado qu...