lunes, 13 de febrero de 2012

Incapacidad

Me maravilla el cuerpo humano
subir y bajar escaleras es magnifico
Los músculos se tensan o relajan
los huesos se preparan al esfuerzo
los pies se adaptan de tal forma
que tu ni lo piensas siquiera
y subes y bajas
a voluntad.
Un día el dolor fue intenso
y algo tan natural se volvió
insoportablemente doloroso.
Acudir al doctor
Fue lo primero.
Medicamentos y fisioterapia
Lo segundo.
Relajante al principio y luego
casi -casi- casi
invalidez total
me desperté en la noche
cubierta de sudor
desee ir al baño a tomar agua
y respirar mejor
pero...
no logré llegar hasta allí
el dolor fue intenso
no podía caminar y tuve que arrastrarme
y me sentí miserable e inválida.
lloré de soledad
lloré de incapacidad
lloré de tristeza, rabia y miedo.
Miedo a depender toda la vida de otros
y que esos otros no estuvieran ahí para mí.
Que no me escucharan llorar siquiera.
A Dios gracias fue una vez
y ahora camino, subo y bajo
y le doy a gracias a Dios
y cuido de mi cuerpo
como si de su gran templo se tratara
y me asombro ante la maravillosa obra
que Dios hizo en mí.

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  Hay muchas cosas que uno dice que se pueden sacar de contexto. Me gusta, prefiero pensar que la gente no es mala, que la malinterpretamos....