jueves, 24 de noviembre de 2016

A un pequeño gatito

Bástian es mi nieto gato.  Él no deja dormir muy bien en la noche porque duerme muy bien de día.
Hoy fui a tender mi cama y como siempre hago, arrojo todo al suelo para poder sacudir las sábanas.  Primero la cobija, las almohadas, la sobre-sabana pesa más de la cuenta y ahí caigo jajajajajaja.  El chiquitín que no lo es tanto, duerme ensurullado en ella.  ¡Por Dios! Casi lo arrojó al piso.
Lo desenredo y dándole besos me disculpo.  Él en realidad no sé ha despertado del todo, así que se acomoda en mi lugar de la cama tranquilamente.  Yo que le doy un par de besos y tiendo la cama sobre él sin que se inmute por eso. 
Ahora sólo lo delata un bulto en mi cama jajajajajaja
Una historiecilla que surge del sueño de un gatico amado.
Patricia Lara P.

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