martes, 15 de julio de 2014

Vida o muerte




Agazapado las observaba.  Las veía e incluso las oía cuchichear entre ellas.  Sentía que en cualquier momento se abalanzarían contra su persona y siendo mayoría lograrían herirlo, dañarlo de alguna manera.  En un momento en que se olvidaron de él y no estuvieron atentas; las atacó.  Dicen que el que pega primero, pega dos veces.  Así que una a una las fue dejando extendidas por el cuarto. 
Mientras se relamía las observaba yacer en el piso muertas unas, moribundas las otras. 
Lo malo de todo es que cuando la “agüela” bajó al comedor y encontró el reguero de servilletas en el piso no se mostró muy alegre.
Patricia Lara P.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Veo

  Veo esas paredes de bahareque, blancas. Puerta roja a juego con la única ventana. Veo a María la O con sus ojos brillantes, su sonrisa y s...