miércoles, 2 de junio de 2021

Frio

 *Cuentos de la Cuarentena*


*_Frío_*

Un venado paralizado en torno a las huellas de su madre, aun frescas en la nieve. No se mueve, excepto por su respiración agitada, que parece querer hacer estallar su cuerpo. Ocho lobos feroces lo rodean. Gruñen unos, ladran los tres más lejanos; todos muestras sus fauces abiertas, sangrantes y amenazantes.  A un lado, también en un silencio inerte, un hombre ataviado con un raído traje de fraile que cubre su cabeza y oculta su rostro, observa la nieve manchada de sangre e iluminada por la clara luna de la refulgente noche boreal. Ve al venado de reojo, este hace lo propio. Es un duelo de silencio y control. El primero en flaquear morirá. Al caos de sonidos amenazantes se suma un dolor que cala los huesos. De pronto, por encima de un promontorio, un lobo más grande se yergue con un aullido desgarrador. El resto de la manada calla y se vuelve en silencio hacia su macho alfa, dando la espalda a sus dos potenciales víctimas. Un pequeño ¡crack! detiene su marcha y, en un segundo, la manada vuelve la mirada hacia el lugar que recién dejaba tras de sí. Atacan con voracidad. Me despierto entre temblores.  La luna llena ilumina mi habitación y la lluvia que se cuela por la ventana abierta de par en par ha mojado el pie de mi cama. El viento sopla tan fuerte que asemeja un aullido. El frío me estremece.

B. Osiris Bocaney

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