domingo, 9 de abril de 2017

Vivo

Vivo

A pesar de que me decía que estaba vivo, yo no podía creerle.
Cómo iba a hacerlo, si con mis propios ojos yo veía ese agujero en su frente y en la parte de atrás de su cabeza esa tronera dejada por la bala al salir.
Cómo iba a hacerlo, si al estirar sus manos para agarrarme, yo las sentía heladas y huesudas.
Cómo iba a hacerlo, si sus ojos inexpresivos y su sonrisa vacía me llenaban de terror.
Pero le dije que le creía y salí corriendo.  No sin antes notar que mi cuerpo yacía inerte a sus pies.

Patricia Lara P.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Me acuerdo (II) El velorio

 El velorio  Me acuerdo cuando  en la casa de la abuela velaron esa niña recién nacida. Me acuerdo que le pusieron mi vestido y zapatos de b...