
Tómame las manos
suavemente
Dime que me amas
quedamente
Bésame los labios
dulcemente
Ama mis rincones
apasionadamente
Tómame despacio
luego con pasión
Dime que me amas
que soy tu ilusión.
Las margaritas de Octavio Octavio amaba las margaritas, pétalos blancos con corazón dorado; repleto de dulce polen. Pero en la calle ochent...
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