Y
Dios nos regaló dos ojos para ver.
Dos
lindas orejitas para escuchar.
Y
solo una boca para hablar.
¿Qué
nos querría decir con eso?
Sensibilidades Definitivamente ser una sensitiva es delicado en este mundo de espinas. La gente parece que viviera en una burbuja y al tene...
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